Los mexicanos vivimos en una cultura muy curiosa. Tenemos costumbres que solo se pueden ver en tierras mexicanas y que tenemos que explicarle a muchos extranjeros el por qué hacemos eso. Para los mexicanos no son costumbres raras, pero simplemente es la forma en que crecimos y vivimos. Este tipo de costumbres puede variar dependiendo de la región de México donde te encuentres, pero normalmente solo tienen pequeños cambios. Te daremos algunas costumbres raras que hacemos los mexicanos y trataremos de explicarlas lo mejor posible.
1. Le ponemos limón a TODO.
Muchos extranjeros no entienden esta costumbre mexicana, sin embargo la aman. “Ustedes le ponen limón a todo, y no se como hacen que funcione pero todo sabe mucho mejor con limón.”, me comentó mi profesor de Inglaterra al hablar de que es lo que encuentra extraño de los mexicanos. ¿Que podemos decir? El limón es esencial para los mexicanos.
2. Si tiene limón tiene tajín
Esta costumbre va de la mano con el primer punto. Si tiene limón es muy probable que le pongamos tajín. El tajín es un polvito de chile con sal. Para muchos extranjeros el tajín es la cosa más picosa del mundo, sin embargo los mexicanos hasta lo comemos por si solo, como si fuera un dulce.
3. ¡Provecho!
“Un extraño me dijo “provecho” en un restaurante. Fue la cosa más rara”, me dijo un amigo de Canadá. Es muy común que los mexicanos digamos “provecho” a las personas antes de que coman, mientras comen o incluso si ya comieron. Esta regla aplica para extraños o a la gente con la que estas comiendo. Simplemente es educación, si no decimos provecho hasta groseros nos sentimos.
4. Los altos en los semáforos.
Algo que para nosotros es la cosa más normal, para algunos extranjeros es lo más raro. En los semáforos mexicanos tenemos shows de gente jugando con fuego, de niños vestidos de payasos, también hay gente vendiendo papas y dulces, o hasta cargadores para el celular. “En solo semáforo compre unos chicles, un aguacate, y vi a un hombre hacer malabares, ¡y sin tener que bajarme del coche!”, comentó un compañero de Alemania.
la cara del cumpleañero en su propio pastel
“Todos estaban diciendo “mordida, mordida, mordida” y yo no sabia que estaba pasando. Lo siguiente que sucedió es que la cara del niño estaba en el pastel”, dijo un amigo de Francia. Es algo raro, pero divertido. El como nació nadie lo sabe, pero sigue siendo una buena tradición en cualquier fiesta.
Estas y otras costumbres raras hacemos los mexicanos. Muchas veces no sabemos no el por que, pero simplemente es la forma en que operamos.